Desconetarnos para volver a conectar

...todo lo importante, requiere tiempo.

Por: Ana María Díaz López 

   Hace algún tiempo que no pasaba por aquí, para escribir en el blog. A veces debemos desconectarnos para volver a conectar, para analizar lo que queremos y movernos hacia ello, y es precisamente ese tema el que quiero tocar.

     Vivimos en un mundo dominado por la inmediatez, todo tiene que ser para ya y, a veces, permitimos que esta aceleración se apodere de nuestras vidas. Es entonces cuando se nos olvida que todo lo importante requiere tiempo, sí, tiempo… lento. ¿Quieres conocer a alguien? Necesitas tiempo de calidad con esa persona. ¿Quieres comenzar un negocio? Necesitas tiempo para aprender, planificar y ejecutar. ¿Quieres viajar? Necesitas tiempo para ahorrar dinero y planificar tu anhelado viaje. ¿Quieres sanar una herida? Requerirás de mucho tiempo enfrentando tus sentimientos y pensamientos para curarla.

     Al dedicarle tu tiempo y atención a alguien, a un proyecto o a cumplir un sueño, le das un valor incalculable y surge el amor por esa persona, por ese proyecto o por algún sueño que estás a punto de cumplir, gracias al tiempo dedicado.

     Debes aprender a pausar, a reflexionar unos minutos y decidir en qué vas a invertir las horas de tu día. No quiero que te acuestes y que cuando te levantes al siguiente día y te preguntes qué hiciste ayer, tú respuesta sea “Estuve todo el día en el celular y viendo televisión”. La sensación de sentir que estás perdiendo el tiempo te provoca ansiedad, por todo lo que dejaste atrasar, y una profunda tristeza, por el tiempo desaprovechado que pudiste utilizar para hacer algo importante como editar tu Resumé, educarte para comenzar un negocio o hasta para llamar a esa persona a quien tienes en el olvido.

      El procrastinar, dejar todo para después y después solo nos aleja de nuestras metas; créeme, yo lo sé.

      Como te decía al principio, a veces hay que desconectarse para volver a conectar. Durante este tiempo dejé muchas cosas para después, pero hubo otras a las que le dediqué mucho tiempo. Me alejé un poquito del blog, pero me eduqué aún más en un área la que quería para comenzar mi proyecto empresarial. Luché con muchos miedos para para poder crear el proyecto (aún los cargo en una mochila en la espalda), pero no he dejado de caminar, no les he permitido que me detengan.

     Te invito a continuar tu conexión con De la vida te cuento y me disculpo por las letras que no me senté escribir y por todo lo que escribí que no publiqué durante todo este tiempo, pero aquí estoy de nuevo. Te envío un abrazo desde Puerto Rico.

Y, no lo olvides, dale valor a tu tiempo.


Derechos reservados ©

Si utilizará el texto o algún fragmento de este, favor de citar a la autora.

Prohibido el uso de este texto para cualquier fin lucrativo.                         

adiazlopez16@gmail.com

delavidatecuento.blogspot.com

Facebook/Instagram: De la vida te cuento

 

Credacción

Servicios de redacción de contenido y copywriting:

https://linktr.ee/credaccion



Comentarios

Entradas más populares de este blog

Somos enanos emocionales

Envejecer en la era digital

¿Quién eres?