Somos enanos emocionales

Por: Ana M. Díaz Lopez

“No, no estás loca; estás enojada

porque te gusta y no te  aguantás

que sea enano. Sabes cuál es el gran

 problema, es que estamos mal

educados, somos unos hipócritas

hijos de puta. Sí, sos hipócrita,

mira cómo te ponéis. Decís no

decís lo que sentís, pero lo sentís

y queréis no sentís lo que sentís,

pero lo sentís, es así”.

Personaje de Corina, película

argentina Corazón de León

     Mis queridos lectores y lectoras, debo informarles que nuestro cerebro está profundamente desvirtuado porque está queriendo encontrar el amor en un sistema de datos irreal, repito, está queriendo encontrar el amor en un sistema de datos irreal.

               
     La belleza, tanto física como emocional, es relativa. Lo que para alguien es bello, para otra persona, no necesariamente lo es.  El concepto de belleza física, por ejemplo, que tenemos en nuestro cerebro es el que la televisión y las revistas nos han provisto. Según estas irreales guías de belleza, (en términos generales) las mujeres “bellas” deben ser altas, delgadas y con cabello lacio; los hombres guapos, por su parte, deben ser altos, delgados, pero corpulentos. Ay, por favor, solo he mencionado 2 o 3 características y no hay muchas personas así por ahí, sabes por qué, porque si es flaca, es muy flaca para tu gusto, si es corpulento, tiene mucha musculatura para tu gusto y así seguimos, buscando una ridícula “perfección” que solamente se logra usando Photoshop. ¿Cuándo y cómo nos manipularon de esta manera?

     En ocasiones, nos enamoramos de alguien que, para nosotros, tiene todo lo que buscamos, pero esta persona tiene algún rasgo con el cual no sabemos cómo lidiar. No sabemos cómo salir con esa persona a la calle porque aunque tu mundo es perfecto con esa persona, no crees que para los demás lo sea. A lo mejor tu nuevo amor tiene una voz chillona, es gordo(a), es muy bajo(a), usa espejuelos, tiene el cabello rizo, es muy flaco(a), se maquilla en exceso, es mayor o menor que tú, no sé, tiene algo que sabes que al tipo de amigos y amigas que tienes no les va a encantar. Te vas desencantando de alguien que pudo haber sido el amor de tu vida; de repente, todo se enmarcó las expectativas que crees que tienen tus familiares y amigos.

      Por eso, admiro a los hombres y mujeres que conocieron a alguien con una belleza diferente, supieron amar a esa belleza diferente y enseñaron a sus familiares y amigos a respetar y a valorar a esa belleza diferente. Los admiro, las admiro porque su seguridad y las ganas de romper con los malditos cánones que nos insertaron como microchip en nuestros cerebros, probablemente les han permitido ser más felices que aquellos que aún tienen miedo de romperlos por miedo al qué dirán. Tu seguridad se refleja en la seguridad con la que  muestras a tu pareja, tu carácter se engrandece porque ya no eres un enano emocional.

      ¿Qué es significa ser un enano emocional? Significa que no hemos aprendido a valorar a las personas más allá de lo que el resto del mundo ve, así de simple. Precisamente por esto, tal vez, hemos perdido a personas que pudieron convertirse en alguien importante en nuestras vidas. Ahora bien, no quiero que se equivoquen leyendo esto y que ahora resulte que busquen personas inmiscuidas en vicios, criminales, maltratantes, no. Con este escrito, pretendo que mires tú y solo tú, tu felicidad, tus sonrisas, tu paz, sí, tu paz, esa paz que a nadie debe preocuparle más que a ti y a quien te la provoca. Tú sabes cuando alguien te conviene y cuando no, tú sabes cuando amas, te aman y cuando no, así que no confundas el mensaje. Te digo algo, si tienes una relación nueva, un amigo o familiar que te quiere sinceramente, solamente quiere verte teniendo una buena calidad de vida y feliz en esa relación.

     Para terminar, aquí va la cita completa del personaje de la película que les sugiero vean:   “No, no estás loca, estas enojada porque te gusta y no te aguantás que sea enano. Sabes cuál es el gran problema, es que estamos mal educados, somos unos hipócritas hijos de puta. Sí, sos hipócrita, mira cómo te ponéis. Decís no decís lo que sentís, pero lo sentís y queréis no sentís lo que sentís, pero lo sentís, es así. Tenemos una frase políticamente correcta para cada caso… mi jefe es judío, es judío y por suerte que no se le nota.  Mi hermano, el putito, no sabes lo sensible que es. Nazis, somos unos nazis. Enana, enana emocional, eso es lo que sos vos”  Personaje de Corina, película argentina Corazón de León.

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